Al disponer sobre el modelo los síntomas y otra información relevante del paciente, podremos ver qué humor o cuáles humores están en exceso y podremos establecer el diagnóstico global de desequilibrio del terreno, causa de los dolores y/o enfermedades del paciente.
No hay que olvidar, sin embargo, que el cuerpo intenta siempre restablecer espontáneamente el equilibrio entre los 4 componentes del terreno. Si lo consigue, el desequilibrio pasa desapercibido y todos los síntomas desaparecen rápidamente, pero si no es así, el paciente sufrirá los signos del desequilibrio, es decir, los síntomas de la enfermedad, así como los síntomas de la reacción del cuerpo.
Las reacciones del cuerpo tienen siempre como objetivo aumentar el humor, es decir, el componente del terreno, que está disminuido (por ejemplo, la fiebre) o eliminar sustancias inútiles y nocivas (por ejemplo, la tos). Y, a menudo, lo que molesta más al paciente son las reacciones del cuerpo más que los síntomas de la enfermedad.
Por tanto, será necesario determinar qué signos y síntomas corresponden a la causa de la enfermedad, cuáles a la enfermedad en sí y cuáles a la reacción del cuerpo, pues el tratamiento, en general, se dirigirá a tratar la causa de la enfermedad y la enfermedad en vez de las reacciones que, si bien son insuficientes, por eso la persona está enferma, son sin embargo útiles.
Lo que complica un poco las cosas, y por eso hay que prestar atención al contexto y tener una visión de conjunto, es el hecho de que un mismo síntoma puede estar relacionado con más de un posible exceso de un humor. Por ejemplo, el restreñimiento puede ser de tipo Viento o de tipo Sangre, la obesidad de tipo Flema o de tipo Sangre, etc.
Para tener la visión completa con todos los detalles del contexto, será necesario incluir en el modelo toda la información relevante referente al terreno de la persona. Así pues, además de todos los síntomas, habrá que prestar atención a la constitución y temperamento de la persona, la edad, la estación, la alimentación, etc.
En cuanto a las causas del desequilibrio, hay que decir que hay 4 posibles, las cuales podemos encontrar aisladas o combinadas entre sí: los traumatismos (físicos o psíquicos), las carencias en la alimentación, las toxinas y la insuficiencia digestiva. Los traumatismos se tratarán con Mioterapia y/o Acupuntura y el resto de causas, debidas a una mala alimentación, con naturopatía.